A diferencia de la cremación tradicional que emite gases de efecto invernadero, la Acuamación es un proceso amigable con el medio ambiente. Esencialmente, solo acelera lo que ocurre en la descomposición natural.
Se utiliza una combinación de flujo de agua suave, temperatura y alcalinidad para acelerar el curso natural del tiempo. El proceso científico se llama Hidrólisis Alcalina y ya se utiliza en la mayor parte del mundo, ya sea en seres humanos o en animales.
Los únicos restos sólidos que resultan de la acuamación son las cenizas minerales de los huesos, las cuales son de un color salvia claro o blanco, está limpia y sin decoloración por carbón.